EL "LEITMOTIV" DE LOS CÍRCULOS PODEMOS
La ciudadanía española tiene una larga historia de lucha en defensa de sus derechos: igualdad social, civil, cultural, lingüística y ambiental. No hay más que ver el triunfo popular que obtuvo el Movimiento 15-M, también llamado movimiento de los indignados, y que actuó como un catalizador de una indignación colectiva emponderando políticamente a la ciudadanía y enriqueciendo el concepto de democracia. Un movimiento ciudadano que sirvió, también, para quitar la máscara a aquello que se vendía como una crisis, y que no era más que el inicio planeado de un proceso de empobrecimiento de la población para un mayor enriquecimiento de las élites económicas.
Un nuevo partido político llamado PODEMOS, formado por cientos de círculos políticos y sectoriales |
Da comienzo una nueva era en la que el sistema de dos partidos alternándose en el gobierno durante más de 30 años entra en decadencia y donde la sociedad civil es la que comienza a marcar el ritmo en la agenda política. Porque es en la calle donde confluyen las diferentes luchas, pre y post-15M, y que se materializan en Asambleas y en un nuevo partido político llamado PODEMOS, formado por cientos de círculos políticos y sectoriales, en los que se organizan cientos de miles de personas.
El trabajo y el esfuerzo que se está haciendo en este proceso de transformación no deben ser desaprovechados simplemente en ocupar puestos de poder dentro de la administración. Esta confluencia debe permitir a la ciudadanía ejercer el control de las instituciones, desde el exterior y, en cualquier momento y circunstancia, independientemente de quien ocupe el poder y la representación de la misma.
Y este debe ser, en mi opinión, el leitmotiv de los Círculos de Podemos. Círculos formados por personas de todo el país, algunos con una trayectoria de trabajo en diferentes movimientos sociales y políticos que han luchado y siguen luchando por lograr el cumplimiento efectivo de Derechos tan básicos como el derecho a la vida y al trabajo digno, la sanidad pública , gratuita y universal, la educación pública, gratuita y de calidad, el derecho a la vivienda, la transparencia en la administración, auditorías ciudadanas de las cuentas públicas, auditorías energéticas, la disponibilidad de unos ingresos básicos. Y que abogan por un sistema de finanzas ético y un banco público. Y también por personas que trabajan para que los responsables del saqueo de los recursos públicos y los corruptos respondan ante la justicia.
Estos círculos de confluencia ciudadana nacen para ayudar a trasladar al ámbito institucional los valores de progreso, solidaridad, tolerancia, igualdad y transparencia que caracterizan a nuestra ciudadanía. Círculos que se comprometen a crear las herramientas de participación ciudadana y de control efectivo, necesario para cumplir con la máxima de GOBERNAR OBEDECIENDO, ampliando los límites de nuestro sistema democrático más allá del voto cada cuatro años.
Somos muchos los que no nos identificamos con el modelo de un país dominante dirigido por una minoría corrupta que gobierna para enriquecerse y servir a sus propios intereses. Frente a estos modelos basados en la corrupción, en la especulación inmobiliaria, en el malgasto y la falta de transparencia de las cuentas públicas, en oposición a la privatización sistemática de los servicios públicos y el distanciamiento y la deshumanización del gobierno, se hace necesario cambiar la forma de hacer política.
El trabajo y el esfuerzo que se está haciendo en este proceso de transformación no deben ser desaprovechados simplemente en ocupar puestos de poder dentro de la administración. Esta confluencia debe permitir a la ciudadanía ejercer el control de las instituciones, desde el exterior y, en cualquier momento y circunstancia, independientemente de quien ocupe el poder y la representación de la misma.
Y este debe ser, en mi opinión, el leitmotiv de los Círculos de Podemos. Círculos formados por personas de todo el país, algunos con una trayectoria de trabajo en diferentes movimientos sociales y políticos que han luchado y siguen luchando por lograr el cumplimiento efectivo de Derechos tan básicos como el derecho a la vida y al trabajo digno, la sanidad pública , gratuita y universal, la educación pública, gratuita y de calidad, el derecho a la vivienda, la transparencia en la administración, auditorías ciudadanas de las cuentas públicas, auditorías energéticas, la disponibilidad de unos ingresos básicos. Y que abogan por un sistema de finanzas ético y un banco público. Y también por personas que trabajan para que los responsables del saqueo de los recursos públicos y los corruptos respondan ante la justicia.
Estos círculos de confluencia ciudadana nacen para ayudar a trasladar al ámbito institucional los valores de progreso, solidaridad, tolerancia, igualdad y transparencia que caracterizan a nuestra ciudadanía. Círculos que se comprometen a crear las herramientas de participación ciudadana y de control efectivo, necesario para cumplir con la máxima de GOBERNAR OBEDECIENDO, ampliando los límites de nuestro sistema democrático más allá del voto cada cuatro años.
Somos muchos los que no nos identificamos con el modelo de un país dominante dirigido por una minoría corrupta que gobierna para enriquecerse y servir a sus propios intereses. Frente a estos modelos basados en la corrupción, en la especulación inmobiliaria, en el malgasto y la falta de transparencia de las cuentas públicas, en oposición a la privatización sistemática de los servicios públicos y el distanciamiento y la deshumanización del gobierno, se hace necesario cambiar la forma de hacer política.
'Pepe' Mujica: el hombre que cambió la forma de hacer política |
Los Círculos Podemos nacen, por lo tanto, con la intención compartida de poner fin a esta situación, para aunar esfuerzos e ilusiones, para construir un país abierto y solidario. Un país para todos y todas. Y será la contribución de todos los ciudadanos convocados a participar en este proceso lo que engendrará el programa que materializará estas intenciones en hechos reales, unos hechos que estarán basados en los principios democráticos de un gobierno ético, de igualdad, justicia social y sostenibilidad.
¡Juntos Podemos!
¡Juntos Podemos!
¡Claro que Podemos!
Este artículo es original de Carlos Bosquet y fue publicado el martes, 3 de marzo de 2015 en la Comunidad PODEMOS
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