Radicalidad o Genocidio: ¡Basta de Mentiras!

¡Ya basta de lloriqueos! ¡Toca hacer autocrítica! Si hay una cuestión que queda clara en EUROPA es que las fórmulas políticas, parlamentarias y de gobierno NO FUNCIONAN. Si miramos para atrás, hoy podemos ver como, desde los tiempos en que Abascal estaba con Rajoy, en EUROPA no han dejado de hacer otras políticas más que las de austeridad. Eso sí, para la gran mayoría, porque la élite, la pequeñísima minoría, derrocha a manos llenas. ¡Un insulto para la inmensa mayoría! Llevamos 15 años con este régimen autoritario en el que se neutraliza lo político para convertirlo todo en una expectativa comercial, en un marketing barato de "vamos a hacer esto, vamos a hacer lo otro" para al final recibir un producto completamente degradado. Igual que los de Aliexpress, todo llega en mal estado y nada tiene que ver con lo que esperábamos. Y ahora, que hemos pasado a una economía de guerra, aún peor, aún MÁS AUSTERIDAD.¡ES DE LOCOS! La frustración en EUROPA es generalizada.s Más del 50% de la ciudadanía se abstiene de ir a votar y otra parte, ignorante, vota a la ultraderecha, encandilada con los cantos de sirena, que les mienten sobre cómo van a resolver los problemas cuando, ¡oh, idiotas!, ya han demostrado que cuando están en el poder hacen exactamente lo contrario. Os acordáis de Rajoy ¿verdad? Nos lo hizo dos veces. ¿Y de Sánchez? Si incumplió con su socio de gobierno, con la presión a la que estos le sometieron, lo que ahora hace con la dócil Sumar es de traca. Ahora es mucho peor. En España, seguirán comerciando armas con Israel y en Europa gastarán el dinero en aviones y bombas para la OTAN que harán más ricos a unos pocos y morirán muchos. Y nuestros derechos laborales, en sanidad, cultura, vivienda... quedarán relegados. Lo peor vendrá cuando manden a nuestros hijos y nietos a la guerra. 

¿QUÉ HA PASADO CON PODEMOS?

A  pesar de todo, hay que reconocer que en esta última década quizás lo único positivo es que hay quien ha demostrado que no todas las políticas ni todos los políticos son iguales. Que las hay que no tiran la toalla de la honestidad. 

Tomemos como ejemplo a Irene Montero. Gracias a su valentía y a la de todo su equipo Podemos ha RESISTIDO. Todo el aparato del #régimen78, político y mediático, iba -y va- a por ellas, pim pam pim pam, a piñón fijo, o las entierran directamente al no mencionarlas con las demás formaciones o mencionar sus logros como si fueran de Sumar. Y cuando hablan de ellas en las tertulias es para hacerlo mal: "¡Qué mal van! ¡Pero si tenían setenta y tantos diputados!", dicen. Mentiras repetidas una y otra vez. Una deshonestidad absoluta. Nunca se ha visto mayor deshonestidad intelectual y política que la que ha habido -y hay- contra Podemos. Y que RESISTAN dice mucho de ellas.

Obviamente, hay muchas fuerzas que no están en el Parlamento, que no se han presentado y que son plenamente respetables. Claro que sí. Pero Podemos es el híbrido, es una "herramienta nueva" surgida hace una década, durante el #movimiento15m, y promovida por las clases populares, por librepensadorxs, intelectuales e incluso libertarixs de todas las comunidades españolas. Que hoy tengan cinco diputados demuestra que, a pesar de todos contra PODEMOS, ellxs resisten.

Y AHORA ¿CUÁL ES LA CUESTIÓN?

Ese proceso de aprendizaje, de conocimiento, debe llevarnos a buscar una interfaz, una sutura entre las luchas por la PAZ, DDHH, INMIGRACIÓN, VIVIENDA DIGNA, SANIDAD, EDUCACIÓN, FEMINISMO, LGTBI, etc... para que estas luchas se auto organicen y se construyan mandatos para la representación. Pero ¡ojo!, no digo estar al servicio de las luchas. No, la gente que luchamos o apoyamos a los movimientos sociales tenemos que pensar cuál es la fórmula. Y creo que no soy el único que pienso que lo que necesitamos es una "subversión completa". Una subversión de la política establecida y de los mecanismos mediáticos parlamentarios. Eso pasa por fórmulas de resistencia al Parlamento, de radicalidad, de impugnación ética, de resistencia a esa criminalización cada vez mayor, dado el fascismo existente. Pero también de unas "luchas de clase subalternas" y de unos movimientos sociales que estén a la altura de un desafío histórico.N

No podemos permitir que las clases dominantes nos sigan imponiendo su mierda de criterios. Ellos siempre hacen lo mismo: tratan de borrar la memoria de cada lucha, de cada victoria de las clases subalternas, como si cada vez tuviéramos que empezar desde cero. Es su estrategia de siempre, dividirnos y separarnos de las batallas que nos precedieron.

Por eso recuperar el alma del #15M es jodidamente vital. No podemos seguir con la cabeza en las nubes, pensando: "Oh, estamos en los 90, a ver si en los próximos 10 años los movimientos crecen, los partidos mejoran". ¡No, carallo! Dentro de 10 años estaremos bajo tierra, igual que lo está Sumar ahora, una sombra de lo que pudo haber sido. 

La única opción es recuperar Podemos como esa herramienta participada, de los que no se venden, de los que no se doblan ante el maldito sistema. Esos que tienen el coraje de representarnos en el Parlamento sin que los jodan desde arriba. Necesitamos un sentido claro de "radicalidad ética", no solo por lo que pasa en mi barrio o mi comunidad, sino por lo que pasa en Europa y en el mundo. 

Tenemos que provocar esos acontecimientos que generen revueltas pacíficas, pero que jodan al sistema lo suficiente como para que cambie de verdad. Y, joder, ¿qué más provocador que el genocidio actual que estamos viviendo? Esto no es una simple masacre más. No son 200 inocentes muertos otra vez. Llevan meses masacrando decenas de miles de inocentes. ¡Esto es genocidio, maldita sea! ¡Basta ya de mentiras y de marketing político barato!

¡Basta de lloriqueos! Lo que necesitamos es acción directa, compromiso radical y un sentido de la realidad que ponga fin a esta mierda. La democracia real no se consigue con buenas palabras y acuerdos en la mesa. Se consigue con cojones, con ética radical, y con el poder de la gente harta de ser pisoteada.